29 junio 2009

El loro de Flaubert


[…Quieres podar el árbol. Sus ramas hirsutas pero rebosantes de hojas se estiran en todas direcciones en busca del aire y del sol. Pero tú quieres convertirme en una encantadora espaldera extendida sobre la pared, que dé unos frutos magníficos que hasta un niño podría coger sin necesidad de una escalera…]

[…A medida que envejecemos, el corazón se nos va desnudando, como los árboles. No hay nada capaz de resistir ciertas ráfagas de viento. Cada nuevo día nos arranca algunas hojas, y eso sin contar con las tormentas que rompen de una sola vez varias ramas. Pero así como el verdor de la naturaleza renace en primavera, el nuestro se va para siempre…]

[…“Los que son como nosotros necesitan tener la religión de la desesperanza. Hay que estar a la altura del propio destino, es decir ser, tan impasible como él. A fuerza de repetir. ¡Es así! ¡Es así! ¡Es así!, y de contemplar el agujero negro, logramos la calma.” Ellen no tenía ni siquiera esta religión. ¿Por qué iba a tenerla? ¿Por mí? Siempre les pedimos a los desesperados que no sean egoístas, que piensen en los demás. Lo cual me parece injusto. ¿Por qué cargar sobre sus espaldas la responsabilidad del bienestar de los demás, cuando ya viven aplastados por la suya propia?...]


Texto: Julian Barnes. El loro de Flaubert.

7 comentarios:

Felipe dijo...

Un texto muy ciedrto, la verdad.

Y deprimente.

Un abrazo.

Felipe dijo...

quise decir cierto, no ciedrto

:)

BLQ dijo...

un texto muy bueno, lo leeré con más calma otro día porque creo que vale la pena.

Me quedo con la última frase, donde dice que es injusto pedirle a alguien que no sea egoísta, cargándole con los problemas de los demás, estando ya al borde de la depresión.

Me quedo con esta frase porque me ha recordado buenos momentos de mi vida, sobretodo con charlas con amigos y amigas. A veces estas charlas iban por los caminos de la depresión y a mí nunca me ha gustado dar consejos. Mas siempre les decía lo mismo: "Sé un poco egoísta y haz lo que te haga feliz, piensa en tí mismo y deja los demás de parte. Solo hay una condición. Hay que respetar, mucho respeto. Pero sé feliz, sé feliz y disfruta".

Era la frase que siempre me salía, incluso una amiga a quien siempre le soltaba lo mismo un día me dijo que me tenía que renovar, pero ella sabía que el problema era que nunca intentaba ser feliz.

saludos y gracias por el texto

JoPo dijo...

rum rum rum en mi cabezota

Valentina. dijo...

FELIPE
Ciedrtamente, jajaja.

Fuera bromas, el texto no es como para echar cohetes, lo reconozco, pero me parecen verdades como puños.

Un saludo transoceánico.

ELOI
Julian Barnes es un escritor inglés que conocí, leyéndolo se entiende, hace como un par de años. Me parece de lo más lúcido e inteligente, aunque claro, no es una literatura de castañuelas.

De todas formas yo le pongo un diez. Por eso lo puse en la entrada.

Me alegro de que te haya gustado.

Salud.

JOPO
Jajajajaj
Rum de rumiar??
Jajaja.

Besos.

migrante dijo...

No lo conocía pero creo que ahora lo buscaré para conocer más de su obra.
Bso.

Valentina. dijo...

MIGRANTE
Otro para tí Migrante.
Por cierto me voy a Méridaaaa!!
Me picaste.

Ya te contaré.
Besitos.